miércoles, 22 de junio de 2011

Cerebro chico o cerebro grande

Esta entrada no trata de ningún libro, trata del tamaño de nuestro cerebro. Hace unos días una amiga me comenta una situación familiar; ella está viendo en televisión un programa que se puede considerar frívolo, que versa sobre las excentricidades de un grupo de mujeres  millonarias o de este estilo, y por ello su pareja le dice algo así como que por ver esas cosas se le va a empequeñecer el cerebro.
No he dejado de darle vueltas al tema, ya que si lo llevo a mi terreno, el de los libros, yo leo muchos que no están precisamente catalogados como novela histórica o filosófica o lo que se pueda considerar lectura culta. Leo libros de novela romántica paranormal, de literatura juvenil, me he leído hasta el de la Dieta Dukan por mero entretenimiento; de modo que mi cerebro debe tener el tamaño de un granito de mostaza.
Señores y señoras, este tema del tamaño ya está muy anticuado; pero quiero hacer una reflexión. A medida que pasa el tiempo, parece que lo que se tiende es a economizar con el tamaño. Ejemplo: una tarjeta micro SD de 32 GB mide 11x15 mm; su capacidad de almacenamiento, para que nos hagamos una idea, es de unas 2.000 fotos; o sea que si las llevamos a que las impriman necesitamos 80 álbumes y una buenas estanterías donde colocarlos.
En definitiva un cerebro pequeño puede tener una información muchos más interesantes que uno grande, de hecho puede que tenga la información que haga feliz a su propietario y no la que lo haga más culto.
Empequeñezcamos nuestro cerebro haciendo las cosas que nos gusta hacer, viendo los programas que nos gusta ver y leyendo los libros que nos gusta leer.

1 comentario:

  1. No!!! Buenísimo..Raquel totalmente de acuerdo!!! y no se porque me siento TAN idantificada

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